Hoy el silencio mental no existe y los sentimientos parecen haberse distanciado peligrosamente del "papel". Me he descubierto varias noches escribiendo desde la técnica pura, usando un verbo efectista aquí, o una palabrita bonita allá, que parecen cargadas de mucho pero en realidad se sustentan en la nada, esa que hoy mismo me tiene bajo sus garras. Como supondrán, escribir así no me gusta, no me hace ilusión y porque respeto este arte por encima de todo y porque ustedes merecen leer algo mejor, he decidido parar.
Pido disculpas a quienes me seguían y esperaban la continuación de las dos historias que tengo a medias. Siempre agradeceré de corazón, el interés, la paciencia y el tiempo que le han dedicado a mis relatos, que son en realidad la esencia de este espacio.
Tal vez sea producto del enorme cansancio que llevo encima, la falta de tiempo, que esté saliendo de una gripe muy larga o alguna otra cosa que me ha tenido con la cabeza en Marte… la verdad no tengo ni idea de que es lo que pueda estar causando este bloqueo y si será pasajero o tomará su tiempo.
Lo único que sé es que este viernes salgo de vacaciones por tres semanas, un viaje que inicio con muchas ganas pero también con una sensación muy rara en el estómago. Durante ese tiempo, pienso poner mi cerebro en off y dedicarme a algo que me encanta como perderme en otros lugares, gozar de mis amigos y pasarla bien.
Espero recuperar pronto mi vocación de escritora nocturna y pueda volver a contarles un cuento que realmente valga la pena.
4 comentarios :
nos veremos antes q marches???
besos y abrazos
Esperare, merece la pena
Hola Syd.
Tal vez necesites desencillar hasta que aclare, como decía Perón.
La espera merece la pena. sigo por aqui.
Marisol de Argentina
Por aquí, te esperaremos. Hasta prontete
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