El Cuento de la Mariposa - Escena 58

Finalmente la transformación de mi departamento había terminado pero no pude decorarla por completo pues no quería que Mauro supiera que esa nueva habitación podría ser la suya. En todo ese tiempo, mantuve lo del trámite de la adopción en secreto delante de él, no quería que se hiciera ilusiones si al final las cosas no salían como se esperaba.

Fue recién después de todos esos meses que mi vida fue ordenándose de nuevo, aunque por las noches me costara un mundo dormirme. Pensaba mucho en ella, más de lo que me hubiese gustado admitir. Hasta que un día, cerca de la media noche, ella me visitó en la cabina del cine.

- Hola
- ¿Que haces aquí?- le pregunté absolutamente extrañada ya que no la había oído subir
- Nada, que tenía hambre, y no me apeteció cenar sola y me dije, hoy es jueves y hay esa oferta en el chifa y pensé que tal vez… quisieras hacerme compañía…- Me enseñó un par de bolsas que llevaba en las manos- tu favorita
- Eh…- le dije levantándome de la silla – Estoy en horas de trabajo Farfalla
- Ya y la película está corriendo sola ¿No?.. anda no te me pongas tan difícil, que solo te estoy pidiendo que comas conmigo – dejó las bolsas sobre la mesa y me miró mientras las abría- siéntate, que esperas.

No me quedó más remedio que sentarme y verla como me servía en un plato de cartón un poco de cada cosa, todas aquellas que a mi más me gustaban. Fue en ese momento que la vi con el semblante mucho más saludable, se le notaba bastante desenvuelta y lucida. Me pareció que estaba particularmente hermosa esa noche y otra vez tuve que hacer esfuerzos para calmar mis ganas de ella. Al terminar se sentó en frente mío y me quedó mirando mientras yo comenzaba a comer en silencio. Tras varios minutos de evadir sus ojos concentrándome en mi plato, ella me dijo:

- Eres adorable… hasta cuando comes… - la miré mientras terminaba de masticar y el corazón inevitablemente se me disparó ante la belleza de su sonrisa…- y eres un desastre también… mira tu cara, en dos segundos llena de grasa- extendió una servilleta y acercándose un poco me limpió el contorno de la boca. Fue un instante apenas que flaqueé en ocultar mi creciente nerviosismo y mis manos torpes me delataron ante ella, quien al notarlo, aprovechó el momento para terminarse de acercar y sentarse sobre mis piernas. Sin quitarme los ojos de encima, con uno de sus dedos, comenzó a dibujar mis labios.

- ¿Sabes que lo intenté? Todos los días… levantándome y diciéndome que no iba a pensar más en ti… y no pude…
- Farfalla yo creo que…

Sin embargo no me dejó terminar y atrapó mis labios con los suyos, terminando por despertar mis sentimientos aletargados y mis terribles ganas de ella. No tardé nada en responderle, en posar mis manos y recorrer su espalda, absolutamente carente de lógica, de memoria, me dejé perder otra vez más por esos labios que me volvían loca...

Al rato, la película había terminado, el cine estaba totalmente a oscuras, menos la cabina de proyección donde, a media luz, ambas tiradas en el suelo, hacíamos el amor por tercera vez esa noche, sin importarnos nada ni nadie, como si el mundo fuera a acabarse al día siguiente.

Llevaba un buen rato echada sobre mí, acariciando uno de mis brazos cuando de pronto, casi de forma imperceptible me dijo:

- Te amo…

Por un momento pensé que lo había alucinado y me asusté, sin embargo, cuando se incorporó y pude ver la forma como me miraba, mis temores desaparecieron por completo. Jamás aunque quisiera, sería capaz de describir todo lo que esos ojos fueron capaces de transmitirme en ese instante.

- ¿Que fuerte no? – Me dijo y yo sonreí ante su comentario-¿Ves lo que me haces hacer?...- Volvió a recostar su cabeza sobre mi pecho- Quería que lo supieras…

No dije ni palabra, solo la abracé fuertemente, pegando todo su cuerpo al mío. Estiré la mano y tiré de una de las mantas que tenía a un costado para cubrirnos. No quise pensar en nada más, solo sentirla así, conmigo, solo conmigo…para siempre…

Mierda y ahora quien será a esta hora, como sea la vieja de abajo con lo de la gotera otra vez…me levanté a regañadientes tras sacar la hoja de papel de la máquina de escribir. Iba re leyendo las últimas líneas que había escrito cuando tropecé con la caja de herramientas que aún no guardaba.

¡Mierda!!! Auuuu

Finalmente llegué a la puerta y abrí, encontrándome con ese hombre enorme mirándome lleno de congoja.

- ¿Reina? ¿Que haces aquí?
- Alex…

Al ver sus ojos rojos, desvastados, lo supe… supe que la había perdido para siempre…
Entrada publicada por SYD708 el viernes, 25 de julio de 2008 .
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5 comentarios :

Anónimo dijo... | 25 de julio de 2008, 19:07

Me has hecho soltar la lágrima pero fíjate que curioso a medida que leyendo iba diciendo cuánto durará el respiro y por lo visto éste ha sido muy pequeño. Prefiero leer el próximo trozo y no adelantarme, eres una artista un besiño
Tempodelecer

Adri dijo... | 25 de julio de 2008, 20:21

Me has dejado sin saber que pensar. La primera parte me ha hecho sonreír y al final me has dejado con un nudo en la garganta y con miedo. Ahora a esperar con ansia el siguiente para ver por donde sales y que no sea lo que creo que es.

Besos, Adri.

Anónimo dijo... | 25 de julio de 2008, 20:55

Dicen que de amor ya no se muere, pero, muriendo, se marchan algunas personas que se llevan esa dosis única e inimitable que un dia regalaron. Alex es una superviviente, es más fuerte de lo que cree. Cae pero se levanta. Pierde pero lucha por ganar nuevamente. Mantengo la esperanza en que lo siga haciendo con o sin Farfalla, que también lucha a su manera y duramente contra sus miedos y monstruos.
Ya han dicho por aquí que escribes de maravilla, sólo puedo decir que estoy muy de acuerdo. Mi conexión a internet se me fue y hoy además de ser viernes (San Viernes) disfruté de varias escenas, un lujo de fin de semana el mio. Gracias, muchas gracias.
Saludos. Buen finde. Magia.

Tatana dijo... | 25 de julio de 2008, 21:43

De peque me gustaban las montañas rusas, eso de estar arriba y bajar de golpe me ponia enferma, tu con esta historia no has dejado de paseame por una y mas con la escena de hoy.

La lei unas dos o tres veces, la 1º me quede fria.
Sin la posivilidad q la noticia q aparentemente le dara Reina era esperable, no me la esperaba de esta manera y mucho menos despues de un momento tan tierno y tan lleno de posible futuro(??)

me niego a repetirme, pero mira q eres, he!!

un beso

SIS dijo... | 25 de julio de 2008, 22:06

Socia, he visto la luz!!!!!